Queridos Frankensmaniac@s:
Mientras un gran número de gentes se enzarzaban en sesudas polémicas sobre si Portugal había dado o no algún punto a España en el casposo festival de música de Eurovisión, vuestro DOCTOR disfrutaba del séptimo arte. He visionado las películas documentales de dos grupos de música que utilizaron su arte para tratar de mejorar unas sociedades podridas y conformistas, como la actual, que nos oprimen hasta casi dejarnos sin aliento.
Las Películas, de recomendado visionado y con muchos paralelismos entre sí, son:
-“PUSSY RIOT: Una Plegaria Punk”
Dir.: Mike Lerner y Maxim Pozdorovkin(2013)
-“SEX PISTOLS, “La Mugre y La Furia”
Dir.:Julian Temple(2000)
La primera nos narra las consecuencias que ha sufrido el colectivo ruso de punk-rock feminista, PUSSY RIOT, por pronunciarse en contra, mediante actuaciones musicales en lugares emblemáticos , del ahora tristemente de máxima actualidad presidente ruso PUTIN. Este colectivo de artistas trata de concienciar a la población desde hace años, de los delirios de omnipotencia de este tipejo que gestiona RUSIA con paradigmas de dictador a la antigua usanza. Las miembros de las PUSSY tratan de llevar con su música reivindicativa y puesta en escena, vestidas con ropas ceñidas de colores llamativos y pasamontañas, un mensaje del peligro que supone a la libertad de expresión el régimen de PUTIN.
Las PUSSY son pues un oasis dentro de la música actual, ejemplificando lo que el arte también debe ser. Un vehículo para remover conciencias paralizadas por el miedo a la represión. Ellas mismas sufrirán esa represión al subirse a cantar al altar mayor de la Catedral de Cristo Salvador en Moscú, en una actuación denuncia de la alianza entre Iglesia y Estado. La protesta, que dura apenas 40 segundos les acarreará ser arrestadas y condenadas a cumplir dos años de prisión.
Aún en estas circunstancias de privación de libertad, seguirán defendiendo su mensaje y propuesta hasta las últimas consecuencias, al igual que en su día hicieron los SEX PISTOLS como se nos muestra en la otra película documental que os he citado.
Los SEX PISTOLS también utilizaron el punk como una revolución musical y cultural contra una sociedad, en este caso británica, donde se ninguneaba al proletariado, que estaba o bien privado de empleo o sumido en trabajos precarios. Estaban obligados a aceptar su suerte con resignación, algo también muy común en nuestros días. Los PISTOLS no trataban de hacer feliz a la gente, pero provocaban con sus “ataques” que la gente se rebelase contra el orden establecido para tratar de cambiarlo. También sufrieron como las PUSSY la persecución del fundamentalismo religioso y del viejo poder gubernamental formado por las grandes familias poderosas económicamente.
Los PISTOLS eran vetados continuamente en radios y ciudades de toda Inglaterra a pesar de tener muchos seguidores. Así, durante la gira “Anarchy” les persiguieron por todo el pais grupos ultraconservadores llegando incluso a agredirles con cuchillos y machetes. Agresiones físicas que también tienen que eludir todo el entorno de las PUSSY, padres y familia íncluidos.
Ambos grupos utilizan la “Violencia de la Mente” y las actuaciones antisistema en lugares vinculados al poder:
-La Plaza Roja de Moscú en la investidura de PUTIN, en el caso de las PUSSY o tocando en barco por el Tamésis frente al palacio de Buckingham, en el año del jubileo de la reina, en el de los SEX PISTOLS.
Coinciden en escribir canciones protesta e irreverentes como “God Save the Queen” porque quieren a sus pueblos y están hart@s de que los maltraten. Canciones que ambos grupos tendrán innumerables trabas para sacar al público por los continuos vetos y presiones. En el caso de los SEX PISTOLS tendrán que ponerse el nombre falso de “THE SPOTS” para tocar en conciertos secretos en pequeñas salas siempre esquivando a las fuerzas represoras del poder establecido que no tolerán voces discordantes.
Asi pues, amig@s, me parece admirable que artistas como estos pongan en peligro sus vidas para hacernos llegar su mensaje y para mejorar un mundo corrupto e injusto. Deberían ser un ejemplo para muchos grupos y artistas que forman parte de nuestro también problemático mundo contemporáneo. Está muy bien divertirse con la música o polemizar con Eurovisión o Operación Triunfo, es respetable, pero el mundo del arte debería ser también un vehículo reivindicativo libre y poder mostrar las injusticias para guiar a las gentes a un futuro mejor.
