El lunes pasado tuve ocasión de asistir a un concierto en la sala Sidecar de Barcelona.
Su ubicación privilegiada en la Plaza Real de Barcelona y su ambiente de los conciertos previos a la maldita pandemia me hicieron sentirme como si volviesen los buenos tiempos (lastima que fuese un lunes, pero hubo bastante afluencia a mi parecer).
Abrieron el concierto los sevillanos The Smoggers que caldearon al público y empezaron a elevar la temperatura de la sala (al estar situada en el sótano la zona de los conciertos, el sudor rockero era palpable).
A continuación, ocasión para ver a The Lords of Altamont que dieron un concierto sólido y que me recordó a los que podíamos disfrutar en
Me llamo la atención como se veía disfrutar al batería pese al calor que se le veía pasar. Hacia tiempo que no vivía un concierto en una sala palpitando rock y con la gente disfrutando.
Y esa sensación de disfrute me la transmitió también la banda desde el escenario.
Concierto para retornar al rock en sala como debe de ser.