Existe un local en New Orleans…le llaman la Casa del Sol Naciente, y ha sido la ruina de muchos… Y Dios sabe que yo soy uno de ellos…
Con esa entrecortada confesión arranca un himno del folk, The House of the Rising Sun. Nadie sabe quién la compuso, ni cuándo, y todo a su alrededor son conjeturas, desde su origen, hasta la identidad del local que lo inspiró.
Varios lugares en Nueva Orleans (Luisiana) han sido propuestos como inspiradores de la canción, pero sólo dos parecen contar con bases históricas relacionadas con el nombre “Rising Sun”; ambas figuran en antiguos directorios de la ciudad.
El primero es un pequeño hotel ubicado en la Conti Street en el French Quarter en la década de 1820.
El segundo es un lugar alquilado para bailes y eventos llamado “Rising Sun Hall” a finales del siglo XIX, ubicado frente al río en el vecindario de Carrollton.
Una guía de Nueva Orleans, sin embargo, asegura que la verdadera » House of the Rising Sun» estaba en la calle St. Louis St. 826-830 entre 1862 y 1874, y que fue conocida así por el nombre de la mujer que regentaba el local, una tal Marianne Le Soleil Levant, cuyo apellido francés equivale en inglés a “ The Rising Sun” (“el sol naciente”, “el amanecer”).
Se grabó por primera vez en 1933 para American Record , » House Of The Rising Sun» también conocida como » Rising Sun Blues » con la voz y guitarra de Tom Clarence Ashley, la guitarra de Gwen Foster y el banjo de Doc Walsh.
Existen más de 400 versiones del tema siendo una de las mejores la que grabó en 1959 una jovencísima Joan Baez.
En 1962 Bob Dylan la incluyó en su disco debut haciendo una versión eléctrica ( Cuanto le debe nuestro Robert Zimmerman a la pobre Baez…)
https://www.youtube.com/watch?v=8F-IKXWVK24
La canción cruza el Atlántico y llega a Londres, donde en 1964 The Animals la convirtió en el primer éxito del folk-rock, convirtiéndola en un revolucionario single que cambió la cara de la música moderna.
The Animals la cantan desde la perspectiva de un hombre, jugador y borracho, que cuenta como esta casa es la perdición de varios, y como ha perdido su vida inmerso en pecado y miseria (hasta esa fecha, en las anteriores versiones, el tema es cantado desde la perspectiva de una mujer que sigue a un apostador a Nueva Orleans y que termina prostituyéndose en la casa del sol naciente).
The Animals comenzó a interpretarla en sus giras junto al gran Chuck Berry. Todo fluyó, desde la magnífica guitarra de Hilton Valentine hasta el gran solo de órgano de Alan Price. Ese solo se inspiró en el éxito Walk on The Wild Side del jazzista Jimmy Smith.
La voz de Eric Burdon, densa como el carbón de su Newcastle natal, hizo el resto. Fue la primera canción que, con una duración de más de 4 minutos, llegó al nº1.
Tanto le marcó, que el cantante llegó a decirse predestinado para esa canción. “ Fué hecha para mí, y yo estaba hecho para ella”, aseguró en 2010.
Y no le faltaba razón: quizás la Casa del Sol Naciente fué la ruina para muchos, pero definitivamente, no para Burdon y compañía…
Un saludo,
Dr Ichabod.