Se acerca el festival favorito de www.drfrankensguitar.com y como veteranos que somos en estas lides os vamos a dar unos pequeños consejos para que, en caso de que asistáis por primera vez al Azkena Rock Festival, vuestra estancia sea mucho más cómoda y agradable.
El festival este año va a tener lugar el 17 y 18 de junio, más allá del 40 de mayo, pero esto es Siberia-Gasteiz, amig@s, así que os aconsejo que os llevéis una rebequita para la noche, porque en cuanto desaparece Lorenzo por el horizonte empieza a hacer una rasca que no veas. El contraste es mayor si cabe con el calorazo que suele hacer durante los conciertos de primera hora de la tarde. Para estos casos una gorrita no suele estar de más, porque a estas alturas del año el sol ya suele empezar a apretar, y da de cara cuando estás viendo los conciertos del escenario principal.
En caso de que las previsiones meteorológicas den lluvia está prohibido introducir paraguas en el recinto. Recuerdo de hecho varios conciertos donde el público protestó porque algunos colaron paraguas, lo que impedía la visión de las personas que se encontraban detrás. Por ello, por respeto a los demás, te aconsejo que te compres un poncho en el chino de la esquina de tu casa y lo metas en la mochila. No ocupa casi nada, cuesta menos de un euro y te puede salvar en caso de chaparrón.
Un aspecto fundamental que muchas veces descuidamos al asistir a cualquier tipo de conciertos es la salud auditiva. No solo para el ARF, sino para cualquier concierto al que asistáis, os recomiendo que llevéis unos tapones para los oídos. Con unos normales de farmacia de gomaespuma es suficiente, pero si queréis algo un poco más sofisticado, en las tiendas de instrumentos musicales suelen vender tapones por unos 20€ que atenúan unos 12 dBA (os recuerdo que los decibelios se miden en escala logarítmica, por lo que 12 dB es mucho), con una atenuación equilibrada en todas las frecuencias, para que no pierdas calidad de sonido.
Hasta hace unos pocos años los puestos de comida en el Azkena eran bastante malos, tirando a pésimos. Pero los dos últimos años la organización se ha puesto las pilas con este asunto. No está permitido entrar comida al festival, pero si tienes pulserita para poder entrar y salir del recinto y aparcas cerca del festival te puedes dejar el bocata en el coche y salir a comértelo entre concierto y concierto. En caso de que optes por comer dentro del recinto, te aconsejo que evites el momento justamente anterior y posterior a los cabezas de cartel de cada día, porque las colas que se forman en los puestos de comida en esos instantes son agobiantes.
Por último, recordad también que el Azkena no es solo ir a Mendizabala a ver los conciertos. Hay que imbuirse del ambiente desde la mañana con los conciertos en la plaza de la Virgen Blanca, tomando unas cañitas y unos pintxos en el Casco Viejo o en la calle Dato o disfrutando de alguno de los muchos bares y restaurantes que preparan interesantes propuestas para estos días. Esto requiere un poco de dosificación, porque los conciertos en Mendizabala acaban pasadas las 3 de la madrugada y ya he visto a unos cuantos estar reventados a las 9 de la tarde. Así que ya sabéis, con cabeza, sobre todo si cogéis el coche, y disfrutad a tope de cada minuto de la experiencia Azkena.
Keep on Rockin’!
Dr. Pretorius