Hoy voy a hablaros de mi último juguetito, la guitarra acústica G9520E Gin Rickey de Gretsch.
Se trata de una guitarra acústica de tipo parlor. Qué es eso? las parlor son guitarras tirando a pequeñas (en algunas páginas web las catalogan incluso como de guitarras de viaje) y en las cuales la unión del cuerpo con el mástil está en el traste 12, en vez de en el traste 14 como suele ser habitual en la mayoría de acústicas, lo cual dificulta mucho el acceso a los trastes más altos.
Robert Johnson con su parlor. La guitarra ideal para el delta blues
Una característica que me ha encantado de esta guitarra es el sistema que tiene para encordar el puente, dado que en vez de los típicos pitorritos de las guitarras acústicas que cuesta horrores quitar y poner, aquí tenemos un puente perforado, similar al usado en las acústicas Alhambra, a través del cual pasamos la cuerda para su colocación con suma facilidad. Yo soy muy maniático con estas cosas y de hecho instalé unos power-pins en el puente de mi Epiphone EJ-200 para ahorrarme quebraderos de cabeza con cada cambio de cuerdas. Con esta Gin Rickey no hace falta poner power-pins, eso que me ahorro.
Detalle del puente
En cuanto al sonido de esta guitarra voy a hacer una clara distinción. Por un lado tenemos el sonido de la guitarra desenchufada, el cual es un sonido apagado, suena a madera, casi como una resonator pero sin ese deje metálico. Digamos que no es el sonido ideal para tocar pop-rock, pero si buscas un sonido de blues o country oscuro, esta guitarra te va a flipar. He grabado un pequeño vídeo en el que toco unos licks y unos acordes con esta guitarra y con una Epiphone EJ-200 (tipo jumbo) para que podáis escuchar las diferencias.
Pero cuando la enchufamos, la pastilla (que no tiene ningún tipo de control de volumen, tono, fase…) se encarga de equilibrar bastante el sonido, haciéndolo más estándar. Os adjunto un vídeo de un canal de youtube donde se aprecia cómo suena la guitarra enchufada. En este vídeo podéis ver también como suena tocada con los dedos (fingerpicking), ya que en el vídeo grabado por mí está todo tocado con púa, y el sonido tiene matices distintos.
La Gin Rickey al lado de otras guitarras para que podáis apreciar mejor la diferencia de tamaños
En resumen esta Gin Rickey no creo que sea la guitarra ideal para introducirse en el mundo de la guitarra acústica o para tener como guitarra acústica principal. En cambio, me parece una guitarra estupenda para tener como segunda guitarra si ya tienes una guitarra acústica tipo jumbo, dreadnought o similar, porque te va a aportar sonoridades y sensaciones muy distintas a las habituales. De hecho he de decir que a mi me costó 2 ó 3 días hacerme al tamaño de su cuerpo, dado que estoy acostumbrado a tocar la acústica sentado y reposar mi brazo derecho sobre el cuerpo de la guitarra, cosa que con esta pequeña parlor no es posible. En cambio es mucho más cómoda para tocarla de pie. Para ello yo utilizo un enganche especial imantado que se acopla al jack de la guitarra y una cinta de cuero para enganchar el extremo de la correa a la pala. Todos ellos son pequeños accesorios que podéis encontrar en vuestras tiendas habituales, pero os dejo aquí los enlaces para que os hagáis una idea.
https://www.thomann.de/es/daddario_cinchfit_acoustic_lock.htm
https://www.thomann.de/es/harley_benton_strap_button_brown.htm
Decir por último que el precio de la guitarra en Txirula es de 257€, por lo que nos encontramos con una guitarra aparentemente de gama baja. Esto se nota fundamentalmente en las maderas usadas (sapeli y nogal), que son más habituales de encontrar en las puertas de tu casa que en guitarras de gama alta. En cambio, el resto de elementos parecen de una guitarra de un mayor precio, al menos en lo que para mí es lo importante. Esto es que los clavijeros mantienen muy bien la afinación, quinta bien, que la guitarra es bastante cómoda de tocar, tiene una acción equilibrada, sin trasteos ni puntos muertos en el diapasón y el perfil del mástil y el diapasón son muy cómodos.
Por otro lado, la estética de esta guitarra es de esas que amas u odias. Yo la amo, me parece una guitarra preciosa, pero para gustos los colores.
Espero haberos servido de ayuda en vuestra próxima compra.
Keep on rockin’!
Dr. Pretorius
